¿DE QUÉ TRATA EL CRISTIANISMO BÍBLICO?

Este es un tema relevante, ya que el Cristianismo bíblico no se fundamenta en un sistema religioso, ni en los diez mandamientos, ni en las ofrendas, ni en los diezmos, ni en la búsqueda de la perfección moral, ni en promesas sobre la felicidad, ni en la erradicación del sufrimiento en el mundo, ni nada de esto. El Cristianismo bíblico trata de una Persona, es acerca de un Hombre que se manifestó al mundo públicamente hace más de 2.000 años. Persona que a Sí mismo se señaló como “Hijo de Dios” (Jn. 10:32-34), lo que los judíos de aquel entonces entendieron que a Sí mismo se hacía “igual a Dios” (Jn. 5:18). Ustedes ya saben que nos referimos a Jesús de Nazaret, la Persona más importante y sobresaliente de la Historia. El mundo y los siglos cambiaron ante Su manifestación, tanto así, que la Historia se dividió en un antes y en un después de Cristo. Es acerca de Jesucristo que trata el Cristianismo bíblico, y aquellos que se dicen ser cristianos se caracterizan por ser creyentes en que efectivamente, este Jesucristo, es el Hijo del Dios viviente (Mt. 16:13-20). Creyentes en que verdaderamente “Dios fue manifestado en carne” (1Tim. 3:16). El Dios Creador de los cielos y de la tierra, Originador de los siglos, Trascendente a la creación contingente (Heb. 1:1-3), vino al mundo que hizo y el mundo creado por Él no le conoció, ni le entendió (Jn. 1:9-10). Es más, no solo lo rechazaron, sino que lo humillaron, golpearon y mataron. ¿Pero acaso podrá ser cierto esto? ¿Será que Jesucristo verdaderamente es Dios? ¿No será tal vez un loco o un mentiroso? ¿Cómo podríamos llegar a saber estas cosas? Para esto no se necesita una fe ciega apartada de la razón, más bien, se requiere de honestidad intelectual ante uno de los acontecimientos fundamentales del Cristianismo bíblico, nos referimos a que Jesús de Nazaret no solo murió crucificado, sino que al tercer día resucitó de los muertos. Si Jesús no resucitó de los muertos, entonces los cristianos no son más que mentirosos o, en el mejor de los escenarios, personas que han vivido sus vidas engañadas. Pero si Jesús de Nazaret verdaderamente resucitó de los muertos, entonces es quién dijo ser: Hijo de Dios, igual a Dios. Y si Dios vino al mundo como Hombre, ¿no deberíamos prestar atención a Sus palabras? Por ejemplo: “El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.” (Jn. 3:36). Amigo, amiga, la evidencia histórica sobre la resurrección de Cristo es abrumadora. Él va a volver pronto y cuando esto ocurra, todos tendrán que dar cuentas delante de Él. Mejor es arrepentirse ahora y volver el corazón al Señor.
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